3 consejos para no tomar mucho Roscón de Reyes
El Roscón es un exceso culinario típico de la Navidad que tomamos el Día de Reyes. ¡Con estos 3 consejos reducirás el consumo de este dulce navideño!
Después de haber disfrutado con nuestros familiares en la tradicional cena de Nochebuena y en la comida de Navidad y tras tomarnos las uvas para despedir el año unos minutos antes de asistir a la primera fiesta de 2017 junto a nuestros amigos… ¡las Navidades todavía no han llegado a su fin!
Los Reyes Magos tienen todo preparado para trasladarse desde Oriente, convertirse en los absolutos protagonistas de las Cabalgatas que recorren las calles de las principales ciudades y los pequeños municipios en la tarde del 5 de enero y llenar de ilusión las vidas de los más pequeños de la casa y de aquellos que ya no son tan niños.
Uno de los principales temas de conversación en estos días en los que el espíritu navideño continúa latente en todos nosotros gira en torno a quién es tu Rey Mago favorito: Melchor, Gaspar o Baltasar. Sin embargo, los debates sobre cuál es el mejor Roscón de Reyes que has probado también los puedes escuchar en cualquier cafetería, reunión con amigos y mientras tomas un café a media mañana en el trabajo.
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Aunque las fiestas navideñas son una época en las que solemos coger entre 3 y 4 kilos de peso, hace unas semanas os mostramos los consejos para no subir de peso en Navidad. ¿Te has fijado que el clásico Roscón de Reyes es un exceso culinario que se convierte en nuestra comida por excelencia durante casi una semana?
Con el fin de que el organismo se recupere tras Nochebuena, Navidad y Nochevieja, existe la posibilidad que todavía no hayas probado ni un bocado de Roscón de Reyes por lo que estás a tiempo de reducir las porciones de este año. ¡Es una tentación que te encontrarás en cualquier lugar pero debes ser fuerte para superarla y limitar su consumo únicamente al Día de Reyes!
Trucos para reducir el consumo de Roscón de Reyes
- Tamaño adaptado al total de comensales: cuando acudimos a la pastelería o supermercado a comprar este dulce navideño tenemos la posibilidad de elegir entre una variedad de rellenos cada vez mayor y diferentes tamaños en función del número de comensales. El error en el que caemos todos los años se encuentra en adquirir un Roscón de Reyes demasiado grande, lo que provoca que tengamos restos durante los días siguientes y lo consumamos cuando la Navidad ya ha finalizado.
- Tomar una única porción: las familias se reúnen el 6 de enero para entregar a sus seres queridos los regalos que los Reyes Magos han depositado en sus casas y aprovechan para tomar Roscón. Es muy normal que nos terminemos juntando con 3 o 4 variedades diferentes encima la mesa, cada una perteneciente a un segmento de la familia, por lo que debes decidir cuál de todos es el que quieres probar. La fuerza de voluntad es fundamental para contenerte al ver cómo tus primos, padres, hermanos o tíos disfrutan como auténticos niños mientras degustan este delicioso dulce.
- Preparar tu propio Roscón de Reyes: seguro que te ha pasado en más de una ocasión que preparas una receta con tanto cariño que al final apenas la pruebas porque le terminas cogiendo algo de manía. A tu familia le encantará un Roscón casero elaborado con ingredientes saludables y tú tendrás la satisfacción de verles con una sonrisa en su rostro pero sin tener la necesidad de tomar una porción excesiva. ¡Tu felicidad será observar cómo se terminan este dulce en cuestión de minutos!
Las de este año habrán sido una de tus Navidades más saludables si eres una de las personas que siguió nuestros consejos para superar un 10K en fin de año. ¡Combina la alimentación equilibrada con la práctica deportiva para que el 7 de enero, una vez las fiestas navideñas pertenezcan al pasado, tú te sientas bien!