¿Para qué sirve el Zinc y en qué alimentos podemos encontrarlo?
¿Sabés para que sirve en zinc? ¿Sabes que alimentos nos interesa consumir para aumentar nuestras reservas? Todo ello te lo contamos en este post.
Hay mucha literatura sobre la Ley de la Abundancia, muchas recetas de la Nueva Era para atraer a nuestra vida todo lo que necesitamos, así que nosotros vamos a andar por otros derroteros en este post. Vamos a aportar una visión más profunda para aprender a conectar con esa provisión infinita que nos corresponde por derecho de conciencia, pero que, a la vez, es invisible. Porque, como bien señaló Einstein, no podemos resolver un problema desde el mismo estado de conciencia en que se ha generado. Así que, este es un post para aprender a conectar con esa provisión invisible, no es un post para aprender a hacerse rico en dos días.
En este momento, está habiendo multitud de mensajes de carencia, de miedo, estamos siendo bombardeados constantemente por los medios de comunicación con palabras catastrofistas sobre la crisis económica que se nos viene encima. Y, a la vez que atravesamos estos momentos de incertidumbre y caos, estos están siendo tiempos para crecer y avanzar, se abren multitud de oportunidades para los que las saben ver. Pero si nos centramos en el miedo y la carencia, nos vamos a perder estas oportunidades.
Tenemos que saber que en la vida espiritual tenemos las herramientas para afrontar lo que venga. La vida espiritual no nos garantiza que no vamos a tener dificultades en nuestro camino, pero sí que vamos a tener los recursos para enfocar de forma correcta esas dificultades.
La abundancia no consiste en tener acumulados recursos materiales. La abundancia, la provisión real, es invisible y, para quien aprende a conectar con ella, va a estar ahí en tiempos económicos buenos y en tiempos económicos malos. Porque esta Ley no depende de nada humano, es una Ley Universal accesible a quien sepa conectar con ella, reconociéndose como un ser abundante y manteniéndose en esta consciencia ante cualquier situación de reto.
En palabras de Jesús: “He venido para que tengáis vida y la tengáis en abundancia.” (Jn 10:10) Pero él también dice: “Mi reino no es de este mundo.” (Jn 18:36). Las palabras de Jesús son una promesa divina, por lo tanto, son verdad, pero tenemos que aprender a aceptar esta verdad universal como nuestra verdad individual personal.
Y hablamos de Jesús, porque forma parte de la tradición espiritual más cercana a nuestro acervo cultural y, posiblemente, de una mayoría en este país. Pero esto es para todos, no solo para sus seguidores. Otras muchas tradiciones espirituales y filosofías aún más antiguas que la nuestra nos hablan de lo mismo. En todas las tradiciones hemos encontrado esta realidad, esta verdad que se revela en nosotros como nuestra Esencia Espiritual.
Pero para empezar a manifestar esta conciencia de abundancia, debemos empezar a morir al mundo, en palabras de Jesús, “renuncia al mundo”. Es decir, soltar nuestras falsas creencias limitantes y nuestra falsa identidad egocéntrica. De ello también hablan los yogis de La India, y todo el sistema del yoga está desarrollado para ello, aunque en occidente nos lo tomemos más bien como un ejercicio físico.
Por otra parte, debemos empezar a reconocer que todo poder creativo viene de la Esencia de la Creación, la Fuente de la vida y de la abundancia, que se expresa a través de nosotros. Así, cualquier tipo de carencia que estemos sufriendo, procede de creer que somos una entidad separada de esa Fuente, y cualquier rama separada del árbol se seca, no puede dar frutos, no puede expresar vida.
Para ser seres abundantes tenemos que permanecer conectados a la Fuente, en todo momento y en toda situación, recordando que, aunque sintamos miedo ante un reto humano, somos una partícula divina, poseedora de todo lo que el Ser posee, que somos polvo de estrellas, que somos Luz. Así, en esta consciencia de quién Soy realmente, no hay entidad ni fuerza en el universo que pueda darme o quitarme nada.
Ante cualquier reto, tenemos que recordar quiénes somos, porque el reto nos ha llegado para que aprendamos a conectar con el verdadero poder que reside en nosotros. Esto es, nuestra propia Naturaleza Creadora, nuestra propia esencia, que no cambia. Y el reto pasará, todo pasa y quien Yo Soy, mi esencia, la Esencia Espiritual que reside en mí, no va a cambiar.
Busca el Reino de Dios y su justicia y lo demás se os dará por añadidura. (Mt 6:33)
La Fuente puede proveer la abundancia en un sinfín de maneras, ante la abundancia de la Fuente en nosotros no hay obstáculos, no hay barreras. Pero para ello es básico reconocer nuestra esencia espiritual como nuestra verdadera naturaleza. Sabiendo a la vez que la Fuente se encarga de todo y manteniendo nuestra atención en esta verdad de forma consciente. Así, ante un reto de cualquier tipo de carencia, recordamos nuestra verdadera naturaleza espiritual, reconociéndola como nuestro escudo protector frente a todo.
Por otra parte, para poder manifestar una vida abundante, debemos tener en cuenta los siguientes aspectos:
Una conciencia abundante se consigue gradualmente, poco a poco, con meditaciones cortas y frecuentes en las que afirmamos y reconocemos la abundancia que somos. Así, lo que no viene de la Fuerza del Bien se disuelve por sí solo, si no le damos poder a través del miedo, y si estamos dispuestos a soltar las creencias erróneas.
También tenemos que darnos cuenta de que muchas veces deseamos algo que no llega, eso es porque la conciencia nos protege de lo que no nos corresponde, de lo que no es para nosotros. Juzgamos según las apariencias con una conciencia muy limitada, sin conocer que todo, incluido nosotros, forma parte de un plan más amplio que no conocemos. Por lo que nos toca confiar en todo como es, en todo como está siendo, y respetar lo que la Vida nos trae como parte de nuestra experiencia en este mundo.
Así que pongamos la atención en desarrollar la conciencia y comprensión de quiénes somos realmente y todo lo demás nos será dado por añadidura.
VICTOR
EXCELENTE COMENTARIO.