Alimentos a evitar con alergia primaveral
Descubre el listado de los alimentos a evitar con alergia porque liberan histamina, una reacción de nuestro cuerpo frente a un alérgeno que provoca inflamación. Una alimentación saludable y equilibrada…
A estas alturas, es muy probable que ya recuerdes como algo muy lejano las fiestas, pero quizá no se pueda decir lo mismo de uno de sus efectos colaterales: el aumento de peso después de días y días de comidas familiares. Si te has llevado un pequeño susto al reencontrarte con la báscula y aún no has logrado quitártelo de encima, el café verde puede ayudarte a conseguirlo. Sí, has leído bien, café verde. Se trata de una variedad de café sin tostar, de manera que conserva muchas propiedades que de otra forma se perderían.
Además, al utilizarse los granos de café crudo, se reducen muchos de los aspectos negativos que suelen adjudicarse al café. Como resultado, su sabor es algo diferente al que estamos acostumbrados. Pero, ahora mismo, lo que nos importa no son las diferencias de aroma o sabor, sino otra cosa: el empujón extra que nos puede ofrecer para recuperar la línea. El fruto del café, en estado puro, tiene una alta cantidad de ácido clorogénico y numerosos estudios aseguran que este elemento reduce la sensación de hambre. Con el hambre calmada ya hemos conseguido una primera victoria, que nos permitirá llegar a las comidas que tenemos planificadas en nuestra dieta sin caer en tentaciones ni picoteos furtivos.
Pero sus beneficios no se limitan a mantener a raya el apetito. El ácido clorogénico también juega un papel activo en la absorción de las grasas, evitando de esta forma que se acumulen en el cuerpo (¡segunda batalla ganada!). Y, ¿qué pasa con la que lamentablemente ya tenemos acumulada? El café verde estimula nuestro metabolismo, aumentando la actividad lipolítica, que es la responsable de regular las grasas que se depositan en los tejidos.
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Por eso, otra forma de llamar al proceso de lipólisis es “movilización de grasas”. Además, algunos estudios han destacado su acción sobre el metabolismo de la glucosa, al inhibir la liberación de glucosa a la sangre se limita la cantidad disponible para energía y se fuerza al cuerpo a quemar más grasa, y también sus propiedades antioxidantes, previniendo así el envejecimiento prematuro.
El café verde está disponible en diferentes presentaciones (cápsulas o líquido). Sin embargo, en ambos casos los profesionales recomiendan ingerirlo dos veces al día, media hora antes de las principales comidas (desayuno y comida).
¿Y ya está? ¿Tomamos café verde y a esperar delante del espejo a que las grasas vayan reduciéndose? No, tomamos café verde con el fin de echarle una mano a nuestra dieta equilibrada y a nuestro plan de ejercicio físico. Sin estos dos pilares de la vida saludable, va a ser realmente complicado obtener resultados. Así que ya sabes: come bien y en las cantidades idóneas, muévete y, ahora sí, piensa en verde cuando cojas tu taza de café.